jueves, 30 de diciembre de 2021

FRAGMENTOS FILOSÓFICOS, nº 129

 






FRAGMENTOS FILOSÓFICOS. FRAGMENTO 129:
 CONTUMACIA.

Por José Pablo Noriega de Lomas

   No deja de asombrar el contumaz apego a formas de pensamiento que la experiencia y la razón han probado como inviables. Nos podemos referir, como ejemplo, a dos cosmovisiones que influyen fuertemente en todas las maneras e instituciones de nuestra civilización. 

   La primera de ellas habla del apego a los mitos de las religiones. No negamos que los mismos tengan su funcionalidad, y que sirvan como prolegómenos de la razón. Pero entender estos relatos como algo realmente acaecido nos parece un hecho que va contra la racionalidad como facultad humana. En Occidente, ello es así, tal como muestra la represión de los repetidos intentos de desmitologización, entre los que sobresalen el deísmo o la Teología liberal protestante.

   La segunda atañe a la persistencia de las ideologías materialistas en la alternativa comunista. En efecto, a pesar del fracaso de esta forma de organización social, que supuso la defenestración de la libertad, hay sectores muy amplios de nuestra cultura que se aferran a ella. Parece que no se ha experimentado su derrota histórica.

    Todo ello es hasta tal punto así, que hace que podamos cuestionarnos la real existencia de un progreso profundo en el desarrollo de esa criatura radicalmente caída que es el ser humano. 


lunes, 27 de diciembre de 2021

FRAGMENTOS FILOSÓFICOS, nº 128

 






FRAGMENTOS FILOSÓFICOS. FRAGMENTO 128:
 DEÍSMO: UNA POSIBILIDAD.

Por José Pablo Noriega de Lomas

  Hay en Occidente un claro retroceso de la religión tradicional. Las encuestas muestran unos porcentajes altos de ateos, agnósticos y no creyentes. Pero las mismas olvidan incluir el número de deístas, que seguramente son muchos.

   Como se sabe, los deístas son aquellos que creen en Dios, pero no en las mitologías. Ello siempre ha sido así, desde la aparición del fenómeno en el siglo XVII inglés. 

   Por otro lado, parece que brillan el ateísmo y el agnosticismo, en tanto que los deístas son invisibles. Pero, sí pueden presentarse como una alternativa distinta en todo a la de la religión tradicional.

  Si lo hicieran, no se dejarían arrastrar por la increencia, y todos saldríamos ganando, pues una cosa es la crítica de la religión actualmente existente y otra muy distinta es la irreligión. En efecto, distinguiendo una de otra habremos dado un gran paso, porque, como hemos indicado repetidas veces, la religión es un beneficio para el ser humano; y una religión purificada, todavía más.

   En conclusión, es muy deseable que la alternativa deísta se convierta en llama viva. Todos ganaríamos, aunque a veces se prefiera el ateo al deísta, olvidando los principios más importantes de la moral, que indican que Dios nos hermana; y que el estado natural es que los creyentes, libres de fanatismo, estén unidos. 


lunes, 20 de diciembre de 2021

FRAGMENTOS FILOSÓFICOS, nº 127

 






FRAGMENTOS FILOSÓFICOS. FRAGMENTO 127:
 OMNIPERFECCIÓN.

 Por José Pablo Nortiega de Lomas

   Para definir la esencia metafísica de Dios, es decir, el constitutivo formal que mejor Lo define, y en el que se fundamentan los demás atributos, la Historia de la Filosofía registra diferentes propuestas como la inmutabilidad (Agustín de Hipona) o la libertad (Calvino); y en la misma Escolástica se proponen otros como la infinitud (Escoto), el ser subsistente ( Aquino, Báñez) o el inteligir (Juan de Santo Tomás).

  Con ello, se parte de una perfección para luego, en la symploké de los nombres divinos, ir deduciendo los demás, que están entrelazados. Así, por ejemplo, la eternidad se puede obtener desde la inmutabilidad.

   No obstante, la Omniperfección como constitutivo formal parece ofrecer mayores posibilidades para organizar nuestro conocimiento, siempre analógico, del Absoluto. Ello es así porque dicho constitutivo permite transitar directamente del núcleo del concepto hacia los demás, tanto los entitativos como los operativos. En efecto, como Dios es el Ser que reúne en Sí todas las perfecciones se puede asegurar que es Eterno, Inteligencia Subsistente, Creador, Omnipotente y así sucesivamente. Y que lo es infinitamente.

   Por ejemplo, puede afirmarse que es Omnipotente en la medida en que se debe pensar que el poder hacer en su máximo grado es una perfección; o que es Inmutable en la medida en que ello significa Actualidad Pura, ausencia completa de falta.

   En fin, de igual forma cabría deducir otros atributos directamente de la Idea a que nos referimos, que también implica la afirmación de Su Existencia. Ello constituye la famosa prueba ontológica, tan trabajada en la Teología Natural. 

lunes, 13 de diciembre de 2021

FRAGMENTOS FILOSÓFICOS, nº 126

 






FRAGMENTOS FILOSÓFICOS. FRAGMENTO 126:
 FRATERNIDAD DIALÓGICA.

Por José Pablo Noriega de Lomas

   En la medida en que una virtud principalísima es la caridad dialógica, se dibuja una manera óptima de oración cuando se dan situaciones de conflicto. No es ampararse en Dios para insistir en nuestra visión, sino pedir la apertura al diálogo y la comprensión. Dios, como dicen los Salmos, es efectivamente roca, pero sería tomarle idolátricamente pensar que nos ampara en todo momento; y, por ello, debemos pensarle abriéndonos al prójimo en el amor.

   Como consecuencia para el mundo religioso, deberíamos considerar que no se ora en la reafirmación de nuestras creencias, porque ello no es propio de la virtud de la caridad, que propicia la apertura en el diálogo. Por ello, no parece adecuado defender al mismo tiempo la caridad y la reafirmación en la propia teología.

   Desde esta perspectiva se bosqueja otra dimensión de la Fraternidad, cual es la de la Fraternidad Dialógica, mediante la que se acepta la Igualdad Racional en el diálogo.

   Esto último es especialmente de aplicación para las interpretaciones fanáticas de la religión,  que se ven a sí mismas como las únicas formas posibles de comprensión del Absoluto. 


sábado, 4 de diciembre de 2021

FRAGMENTOS FILOSÓFICOS, nº 125

 





FRAGMENTOS FILOSÓFICOS. FRAGMENTO 125:
 CONEXIONES.


Por José Pablo Noriega de Lomas

   En nuestro mundo ocurre que, tanto política como religiosamente, las instituciones están organizadas de tal manera que, filosóficamente hablando, están unidas las posiciones temáticas. Así, por ejemplo, el comunismo suele ir acompañado de la teoría marxista o de una determinada concepción de política para los sexos.

   Pero, esta forma de organizarse la política en general, sucede aleatoriamente, de modo que no hay ninguna necesidad intrínseca de que las agrupaciones y las ideologías tengan los ítems conectados como realmente están. Puede por ello imaginarse un comunismo ni ateo, ni beligerante con la religión. Y parecida desconexión a la de este caso puede efectuarse con otras ideas como la liberal.

   Otro tanto pasa en la Religión. Aquí también la deconstrucción, la desconexión son posibles. Así, el catolicismo, en la obligación de la comunión espiritual empuja a aceptar toda su dogmática, en la que tampoco hay unión necesaria.

   En el orden religioso de cosas, el protestantismo ofrece mayor variedad y libertad, pues en él hay diversos matices y opciones, por lo que no es monolítico. Así, el protestantismo es mayoritariamente trinitario, pero también pueden encontrarse en él iglesias unitarias. Igualmente, se pueden encontrar otras comuniones como calvinistas, metodistas, Iglesias de Cristo...

   Aún con todo, tanto en política como en religión, predominan las constelaciones grandes, y escasea el librepensamiento, que habitualmente es ignorado. 


jueves, 2 de diciembre de 2021

FRAGMENTOS FILOSÓFICOS, nº 124

 





FRAGMENTOS FILOSÓFICOS. FRAGMENTO 124:
 INMUTABILIDAD Y ETERNIDAD.

Por José Pablo Noriega de Lomas

   Escribe Modesto Berciano en su manual "Teología Natural" que el hombre tiene como una "potentia obedientalis", que de alguna manera le lleva a dar el salto hacia la afirmación de Dios; lo cual tematiza la Filosofía como Teología Racional en forma de pruebas de Su existencia.

   Creemos nosotros que es como si los humanos tendiéremos a dar el paso a lo Perfecto (como Anselmo de Canterbury mostró en su famoso argumento). Así, Parménides concibió el Ser como inmutable y eterno. 

   Inmutabilidad y eternidad son atributos entitativos de Dios, según la Escolástica, por lo que la Escuela se sitúa en la tradición que inaugura el pensador presocrático; aunque éste negaba el mundo, y lo creía apariencia en su intento "a priori" de racionalización de lo real, mientras que aquélla obviamente reconoce la existencia del mundo.

  Por otra parte, según Zubiri, se da una aprehensión primordial de la realidad, debido a que lo real existe "de suyo". 

   Ocurre, entonces, que la existencia de la realidad como mundo se impone ineluctablemente. 

   Por consiguiente, la solución Escolástica es mejor, porque combina los dos aspectos: Por una parte, la existencia del mundo; por otro, la de la Perfección, que es la Realidad divina, superior a todo, inmutable y eterna.

  En fin, en este sentido, la Filosofía Perenne sigue la huella de Aristóteles, quien no niega el mundo ni la Perfección, y armoniza el problema distinguiendo entre potencia y acto. De este modo, salva las aporías de Zenón, así como también la solución de Heráclito, en las disciplinas filosóficas de la Metafísica y la Teología.